Sesenta personas fueron detenidas después de que un aeropuerto de Majachkalá, la capital de la república rusa de Daguestán, fuera irrumpido por una multitud de personas para buscar a judíos e israelíes en un vuelo que supuestamente venía de Israel.
“Más de 150 participantes activos en los disturbios fueron identificados y entre ellos 60 fueron detenidos“, dijo el servicio de prensa del Ministerio del Interior ruso en un comunicado.
El portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, culpó a la “injerencia externa” de los hechos ocurridos en el aeropuerto, sin embargo, no precisó su origen.
En cambio, el presidente de Daguestán, Serguéi Mélikov, afirmó, sin presentar ninguna prueba, que estos incidentes fueron organizados desde territorio ucraniano, en pleno conflicto armado en Kiev y Moscú.
Debido a esta situación, el presidente ruso, Vladimir Putin, mantendrá este lunes por la noche una reunión con los ministros de Defensa y de Relaciones Exteriores para abordar “los intentos occidentales de utilizar los acontecimientos en Oriente Medio para dividir a la sociedad rusa”, añadió Peskov.