El titular del Ejecutivo condenó los hechos ocurridos en el municipio de Zoquitlán en donde una familia, con dos menores de edad, fueron asesinados y quemados en su propio hogar.
A través de su cuenta de Twitter dio a conocer que la Secretaría de Seguridad Pública participa en el esclarecimiento de los hechos ocurridos la madrugada del 7 de octubre, aportando la información pertinente a la Fiscalía Puebla para su investigación.
“Más allá del móvil que la autoridad ministerial determine, la violencia en cualquiera de sus expresiones siempre será condenable, más aún cuando involucra a personas inocentes”, escribió.
Una familia de cuatro integrantes, entre estos dos menos, de la comunidad de Tepexilotla, perteneciente al municipio de San Pablo Zoquitlán, ubicado en la Sierra Negra de Puebla,
fueron brutalmente asesinados a balazos, y posteriormente, su vivienda fue incendiada, dejando los cuerpos calcinados.
Ha trascendido que un grupo armado entró a la vivienda para dispara en contra de estas personas con orígenes indígenas; los vecinos reportaron a las autoridades múltiples disparos de arma de fuego, seguidos por el inicio del incendio en la vivienda de la familia.
Aunque intentaron sofocar las llamas, el fuego se propagó rápidamente, consumiendo por completo la vivienda construida con lámina y madera.
Elementos de la Policía Municipal de Zoquitlán y personal de la Fiscalía General del Estado llegaron al lugar para realizar las indagatorias correspondientes y proceder al levantamiento de los cadáveres para su traslado al anfiteatro municipal de Tehuacán.
Las víctimas mortales de esta masacre fueron Uriel “N” y su esposa Angélica “N”, así como sus dos pequeños hijos, Abad Uriel “N” de 9 años de edad e Iker de 6 años.
Los familiares de las víctimas exigen un esclarecimiento de los hechos y dar con los responsables del crimen, pues la comunidad ha denunciado que desde hace años ocurre desaparición de personas, desplazamiento forzado de familias y supuesto cobro de piso.
En tanto, la Secretaría de Seguridad (SSP) relacionó el control de territorio de grupos delictivos que operan en los límites con el estado de Veracruz con el brutal asesinato de una familia, con dos menos, que fueron ejecutados y calcinados en Zoquitlán.
La dependencia estatal, a cargo de Daniel Cruz Luna publicó un boletín informativo en el que lamentó los hechos en el que perdieron la vida Uriel, su esposa Angélica y sus dos hijos menores, todos de origen indígena.
La dependencia indicó tener la hipótesis de que los hechos están relacionados con la problemática delictiva que se presenta en zona limítrofe con el estado Veracruz, por lo que coadyuvará con la Fiscalía General del Estado para aportar la información necesaria que contribuya al esclarecimiento de los hechos.
Asimismo, la SSP reiteró el compromiso de mantener y reforzar el trabajo operativo en los límites entre Puebla y Veracruz con el fin de disuadir y prevenir la comisión de delitos, así como dar resultados en el combate a la delincuencia.