inflación Freepik

Para el segundo semestre del año se prevé que la inflación y la desaceleración sean las principales amenazas para la economía, de acuerdo con Ve por Más.

TE PUEDE INTERESAR:   Repunta hasta 7.99% inflación en junio

El grupo financiero estimó que la inflación alcanzará su punto máximo en agosto, ubicándose en un rango entre 8.25% y 8.30% anual, para luego moderarse y cerrar 2022 en 7.40%. Además, proyectó que la economía empezará a perder dinamismo en el segundo semestre.

Indicó que durante el primer semestre el consumo privado se recuperó de una forma importante, impulsado por las mejoras en el mercado laboral, la confianza en el consumidor y un buen desempeño de las remesas.

No obstante, estimó que hacia adelante el consumo privado, uno de los principales motores de la actividad económica desde la demanda, empezará a perder fuerza debido a las presiones inflacionarias, afectando a los sectores retail y consumo frecuente, que durante estos meses han mostrado habilidad en sus estrategias comerciales para mantenerse fuertes.

TE PUEDE INTERESAR:    Prioridad mundial debe ser frenar inflación: Fondo

“La inflación erosiona el poder de compra de la gente y por lo tanto, su capacidad para consumir. Esto posiblemente se refleje más en los bienes que no sean de primera necesidad, también en servicios que sean más discrecionales”, apuntó Alejandro Saldaña, economista en jefe del grupo.

“Además, el incremento en las tasas de interés encarece el financiamiento y esto también le va a pegar, seguramente, a la adquisición de bienes durables, que muchos de ellos se hacen a través del crédito”, añadió.

Refirió que aunque la confianza del consumidor está en niveles elevados, en las últimas dos lecturas ha empezado a disminuir por un contexto económico incierto.

El sector industrial observó un desempeño positivo, y logró contrarrestar los efectos de las interrupciones de las cadenas globales de suministro con incrementos en precios y márgenes promedio. Sin embargo, hacia adelante se espera que los incrementos en los precios de las materias primas y los energéticos continuarán presionando los márgenes.

El sector de la construcción enfrentó presiones en sus márgenes, pero tenía una demanda acumulada por proyectos suspendidos. Aunque para el segundo semestre se vislumbra que el escenario de precios seguirá positivo para el sector, también persistirán las complicaciones en las cadenas de distribución y mayores precios de energía, costos de fletes e importaciones.

México se estancará en 2023: BofA 

Bank of America revisó a la baja su estimación para el PIB de México el próximo año al pasarla de 1% a 0%, en línea desaceleración prevista de su vecino y principal socio comercial, Estados Unidos. Para este año pronosticó una expansión del 1.9%.

Según el prestamista, el PIB mexicano se verá afectado por factores externos, particularmente las alzas de las tasas de interés en Estados Unidos, mientras que a nivel doméstico los mayores costos de financiamiento y de la energía, y una política fiscal aún algo restrictiva, sumarán presión a la economía, que ya enfrenta incertidumbre ante las dificultades del T-MEC.

El FMI recortó el estimado para PIB de México en 2023 de 2.5% a 1.2%, así como para el resto del mundo, debido a que prevé una desaceleración fuerte en Estados Unidos y China, mientras que analistas privados consultados por Banxico en julio redujeron su expectativa de 1.90% a 1.60%.

 

LEG

Ver nota original