Al resaltar la coordinación entre los tres órdenes de gobierno para actuar con prontitud ante la explosión de una toma clandestina en la junta auxiliar de San Pablo Xochimehuacan, lo que evitó una tragedia mayor, el gobernador Miguel Barbosa Huerta dejó en claro que este hecho no quedará impune, pues la ley será aplicada en contra de quien resulte responsable.
En conferencia de prensa en la que estuvieron presentes el presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez; el director de PEMEX Logística, Javier González del Villar; el comandante de la VI Región Militar, José Alfredo González Rodríguez, Ernesto García, comandante de la Guardia Nacional, así como autoridades municipales, estatales y federales, el titular del Ejecutivo anunció que el Gobierno del Estado indemnizará a la familia de la persona fallecida, pagará los gastos de las y los poblanos hospitalizados y reparará las viviendas dañadas.
Asimismo, y tras expresar su solidaridad con la población afectada, puntualizó que el Sistema Estatal DIF apoya con alimentos e insumos de primera necesidad a quienes están en los albergues y lo mismo se hará con las familias que perdieron sus viviendas y que se encuentran evacuadas.
Comentó que para evitar saqueos y que el patrimonio de las y los poblanos que fueron evacuados resulte afectado, las policías Estatal y municipal patrullan la zona. Además, indicó que ningún dato sobre lo que acontezca sobre este hecho será omitido.
El titular del Ejecutivo informó que instruyó la integración de un grupo interinstitucional para atender este hecho, mismo que estará conformado por autoridades de los tres órdenes de gobierno.
Por su parte, la secretaria de Gobernación, Ana Lucía Hill Mayoral reportó un deceso y 54 casas afectadas (hasta el momento) por la explosión; refirió que existen mil 471 elementos desplegados de las diferentes instituciones federales, estatales y municipales.
Reportó que el gobierno estatal tiene habilitados tres albergues: en el Auditorio de la colonia Villa Frontera, el Centro Escolar Gregorio de Gante en San Jerónimo Caleras y el Templo Mormón en bulevar Norte y la 9 Norte.
Puntualizó que, con binomios caninos, las corporaciones de protección civil y de seguridad pública trabajan en la búsqueda de posibles personas afectadas entre los escombros.
En su intervención, el presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez precisó que a través del trabajo coordinado con el Gobierno del Estado fue establecido un centro de mando en la zona y que las solicitudes de información serán atendidas en la línea 911.
Informó que como parte del gobierno municipal fueron desplegados elementos de la Secretaría de Gobernación, Atención Ciudadana y de Protección de Víctimas del Delito para atender de manera directa a la población ubicada en el perímetro resguardado.
Refirió que se hizo un recorrido por la zona afectada en compañía de la secretaria de Gobernación Ana Lucía Hill Mayoral y del comandante de la XXV Zona Militar Gerardo Mérida Sánchez para empezar a cuantificar los daños.
En tanto, el comandante de la VI Región Militar, José Alfredo González Rodríguez reportó que desde la 1:34 horas cuando se tuvo el reporte de la fuga de gas, hasta antes del momento en que se registró la explosión, fueron evacuadas alrededor de 2 mil personas, primero en un radio de 300 metros, luego de 500 y por último, de un kilómetro.
Informó que la Secretaría de la Defensa Nacional y la Guardia Nacional tienen desplegados 350 efectivos, a los que se sumarán 300 más de la Fuerza de Tarea del Valle de México.
Dijo que ambas instancias distribuyen alimento caliente en los albergues instalados.
A su vez, el director general de PEMEX Logística, Javier González del Villar informó que la fuga está controlada, por lo que no hay riesgo ya para la población, sin embargo, se mantienen restricciones en la zona. Dijo que una vez que la presión de gas baje y el ducto esté totalmente sellado, iniciarán con los trabajos de reparación.
Explicó que, de acuerdo con los primeros reportes, en el lugar de la fuga estaba una pipa y aproximadamente 20 tanques de gas, los cuales probablemente eran abastecidos con el hidrocarburo de manera ilegal. Añadió que la nube de gas encontró puntos calientes, lo que generó la explosión.
En su intervención, el secretario de Salud, José Antonio Martínez García informó que las 11 personas que resultaron heridas, cuatro menores y siete adultos, están internadas en los hospitales para el Niño Poblano y zona Norte. Explicó que tres de los pacientes están intubados por las quemaduras que presentan.
Respecto a las condiciones físicas del Hospital de Traumatología y Ortopedia, el titular de los Servicios de Salud detalló que solo hubo vidrios rotos y caída de plafones, por lo que el inmueble opera ya al 100 por ciento luego de la evacuación preventiva de 37 pacientes.