Cuando Claudia Rivera Vivanco dejó entrever que podría buscar la reelección como presidenta municipal de Puebla, para ser, obviamente, candidata por Morena, muchos se botaron de risa.
Sin embargo, donde la idea fue vista con buenos ojos fue en Casa Aguayo y no con el 03 (Secretario de Gobernación), sino con el mismísimo 01.
Me explico:
El partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) viene a la baja. Su aceptación es cada vez menor. Las preferencias electorales favorecen a otros partidos, en particular al PAN.
¿Entonces? ¿Qué hacer? ¿Cómo enfrentar las elecciones de 2021 sin perder la mayoría del Congreso del estado?
Pues la respuesta es sencilla: Separar a Morena del gobierno de Luis Miguel Barbosa Huerta.
Es decir:
Barbosa saca las manos de la elección interna de Morena y deja el camino libre para que Claudia Rivera sea candidata, nuevamente, a la presidencia municipal de Puebla.
Barbosa aplica su plan B, que más bien es su plan A: Conforma una gran coalición partidista (al estilo morenovallista) con un candidato (varón) ciudadano; se desmarca de Morena y ahora sí, podrá competir sin el lastre o ancla que significa el partido en el poder.
Ahora bien: ¿Quién es el candidato que Barbosa tiene en la cabeza?
Pronto lo sabremos. Pero pronto, es pronto.
Punto.
He dicho y he escrito.
CARVAJAL NO ATACÓ A BRACAMONTE
Alejandro Carvajal Hidalgo, diputado federal y posible candidato a la presidencia municipal, hizo una aclaración con respecto a la columna anterior en la que comenté:
“Alejandro Carvajal Hidalgo, diputado federal por el sexto distrito de la capital poblana, anunció ayer que Bracamonte ya no es delegado con funciones de presidente. O sea que: Ya vaya a confinarse a su casa, porque en el partido nada tiene que hacer”.
Al respecto y vía redes sociales, el legislador hizo la siguiente precisión:
“Con respeto aclaro tu comunicado, mencioné que había que esperar a que el consejo definiera y esperar la convocatoria. Saludos afectuosos”.
Punto.
Cosas claras, amistades largas.
NI OBAMA
Elecciones conflictivas; gobernadora de 10 días; incertidumbre; gobierno interino; elecciones otra vez; gobierno acortado, la 4T al poder y ahora el coronavirus… No bueno, nada más nos falta otro sismo que no lo evitaría ni Obama.
EL VERDUGO
Por cierto, nadie se ha dado cuenta que los únicos que no sufren de la contingencia sanitaria ni de la crisis económica son los partidos políticos mexicanos. El Verdugo dice: Y todavía vamos por más.
Recuerden: De Buena Fuente no es la mejor columna política, pero tiene a los mejores lectores.