La respuesta. La periodista y escritora puntualizó que la magistrada encargada del caso “debe de subsanar vicios de su ejecutoria”
Por: Jaime Carrera
El Segundo Tribunal Unitario del Vigésimo Séptimo Circuito —con sede en Cancún, Quintana Roo— supuestamente otorgó un amparo al ex gobernador de Puebla, Mario Marín Torres y al empresario Kamel Nacif Borge contra la orden de aprehensión que tienen por la presunta comisión del delito de tortura en agravio de la periodista Lydia Cacho Ribeiro.
A través de sus redes sociales, la escritora afirmó que dichos personajes no fueron amparados por el delito de tortura, sino más bien “el intento de librar la orden de aprehensión en su contra fue rechazado”.
“#ULTIMAHORA El amparo es solamente para que la magistrada cambie de tortura federal a ley de Quintana Roo. NO se eliminan las órdenes de aprehensión. El castigo será el mismo. No nos rendiremos hasta que todos estén en prisión y sentenciados.
#NoMásPederastasNoMásCorrupción”, posteó en sus redes sociales.
El documento que compartió en su cuenta de Twitter puntualiza que la magistrada encargada del caso “debe de subsanar vicios de su ejecutoria”. De acuerdo con el portal de noticias Página Negra, la periodista explicó que “la clave para entender ello se encuentra en el segundo resolutorio sobre el amparo que pide remitirse a la parte final del último párrafo de la ejecutoria, que dice que por tratarse de un delito grave (dichos personajes) no podrán ampararse”.
“La defensa de Mario Marín está buscando ganar tiempo para hallar algún tipo de acuerdo político. Lo que publican es incompleto, el amparo es negado. Sólo le exige a la magistrada que se haga una modificación en la orden de captura, pero no los libera de ninguna responsabilidad”, sostuvo Cacho Ribeiro.
El fallo fue emitido el pasado lunes 11 de noviembre; sin embargo, la autoridad federal lo resolvió un día después y fue publicado bajo los folios 15/2019, 16/2019 y 40/2019 en la lista de acuerdos del Poder de la Judicatura Federal.
De acuerdo con dichos expedientes, a principios de octubre de 2019 los presuntos torturadores interpusieron un recurso de revisión, luego de que el 12 de junio del mismo año la juez Decimosegundo de Distrito de Amparo en materia penal de la capital del país dejó sin efecto la suspensión del proceso judicial concedida previamente —el 7 de mayo— por una autoridad federal en Quintana Roo.
Cabe recordar que a la fecha Marín y Nacif se encuentran prófugos de la justicia. En el caso del ex mandatario priista, la orden de aprehensión fue emitida el pasado 11 de abril de 2019 por el Primer Tribunal Unitario de Quintana Roo.
La última vez que el ex gobernador poblano fue visto antes de que fuera buscado por las autoridades fue en un mitin político, y posteriormente se presumió que había asistido a una fiesta en el municipio de Atlixco.
El pasado 7 de noviembre, Crescencio Marín, padre del ex gobernador, murió a los 96 años de edad; el velorio se llevó a cabo en Valle de los Ángeles, hasta donde llegaron ex funcionarios de su administración como Valentín Meneses y Alberto Jiménez Merino, no así el ex mandatario priista.