Por: Agencia Notimex
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Las enfermedades cardiovasculares son las que más muertes causan en el mundo, y en México cada año mueren aproximadamente 100 mil personas por infarto al miocardio y otros pacientes que sobreviven a estos eventos requieren de un dispositivo que repare el daño en las arterias.
La enfermedad cardiaca se produce cuando las arterias se estrechan, generalmente por placas o depósitos de grasa y el corazón es incapaz de seguir bombeando sangre. El síntoma más común es dolor en el pecho, aunque no siempre sucede así.
La atención oportuna y la colocación de un catéter o stent son dispositivos cardiovasculares que se insertan de manera permanente en las arterias para abrirlas y que pueda continuar el flujo sanguíneo.
Los dispositivos cardiovasculares como los catéteres o stents ayudan a salvar la vida de pacientes que sufren infarto al miocardio, ya que con estas herramientas que se colocan en las arterias para poder mantener el flujo continuo el corazón puede seguir trabajando y disminuye la necesidad de tratamientos específicos.
Sin embargo, no todos los pacientes son candidatos a que se les coloque un stent, principalmente quienes tienen diabetes tipo 2, ya que las arterias son más estrechas y eso provoca en ocasiones que no pueda entrar el dispositivo aún cuando es de dimensiones milimétrica.
Para estas personas la opción puede ser un catéter balón, que ayuda a dilatar las arterias llegando incluso a las lesiones más complejas, haciéndolo un tratamiento efectivo.
México tienen un alto índice de personas con diabetes y la mayoría de los pacientes fallece por complicaciones en la salud cardiovascular.
Carlos Macaya, presidente de la Fundación Española del Corazón, dijo en conferencia de prensa que cuando se implantan estos dispositivos en el paciente, se empiezan a cubrir de una fina capa de células, las mismas que revierten la pared de la arteria y comienzan a formar parte de la misma.
También hay un stent fármaco-activo que contiene un inmunosupresor y el dispositivo tiene un desempeño similar a otros que ya existen en el mercado.
La empresa española iVascular, ingresó al mercado mexicano con un portafolio de stents y catéteres balón para ofrecer más opciones a los médicos y pacientes, para reducir las muertes por enfermedad cardiaca.
Estos dispositivos se usan como parte del procedimiento angioplastia y su uso se puede recomendar por los profesionales de la salud a personas que sienten dolor en el pecho (angina de pecho), en caso de que no haya mejoría significativa con los medicamentos.
Jorge Cortés Lawrenz, presidente de la Sociedad de Cardiología Intervencionista de México (Socime), dijo que México es el país con la tasa más alta de muertes cardiovasculares entre los países miembro de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), además de que cada año se realiza un importante número de angioplastias.