Tras su triunfo el 2 de junio, Armenta, gobernador electo, reafirmó su compromiso con los pueblos originarios y la defensa de sus derechos. Como primera actividad, acudió a Canoa y La Resurrección, juntas auxiliares de Puebla que albergan comunidades indígenas comprometidas con planes de desarrollo, como corredores gastronómicos y aldeas prehispánicas.
El impulso, desarrollo y bienestar de los pueblos originarios se logrará con una visión sostenible de sus territorios y recursos naturales, así como fortaleciendo sus instituciones, culturas e identidades a través de la participación, consulta y acuerdos en sus comunidades, aseguró Armenta.
También destacó la importancia de la Reforma Constitucional sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y Afromexicano como pilar esencial para la reconciliación nacional y la Cuarta Transformación de la República. “Esta reforma constituye la base para lograr la verdadera reconciliación nacional, a fin de que México sea la casa de todos bajo la máxima del gobierno humanista que ‘por el bien de todos, primero los pobres’, los más humildes y olvidados, en especial los pueblos indígenas”, expresó.
El gobernador electo delineó varias propuestas específicas en materia de atención a los pueblos originarios. Entre ellas, se encuentra el reconocimiento y respeto a las tradiciones y costumbres; la implementación de programas que aseguren el acceso a servicios básicos de salud, educación y vivienda para las comunidades indígenas; promover la participación activa de los pueblos originarios en la toma de decisiones que afectan sus comunidades; e impulsar proyectos de desarrollo económico que sean sostenibles y respetuosos con el medio ambiente y las tradiciones locales.
En estos encuentros, el gobernador electo escuchó de primera mano las necesidades y
aspiraciones de los habitantes, estableciendo un diálogo directo que fortalece la confianza y colaboración entre el gobierno y los pueblos originarios. Además, Armenta hizo hincapié en que la protección de los derechos de los pueblos indígenas no solo es una cuestión de justicia social, sino también una condición indispensable para el desarrollo sostenible de todo el país.
La Reforma Constitucional sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y Afromexicano es vista como una herramienta fundamental para consolidar un México más justo e inclusivo. Armenta concluyó que la implementación de esta reforma será una de sus principales prioridades una vez que asuma el cargo, asegurando que su gobierno trabajará incansablemente para garantizar que los derechos de los pueblos indígenas sean respetados y protegidos.
En resumen, Alejandro Armenta, gobernador electo de Puebla, ha dejado claro su compromiso con la justicia, dignidad y derechos de los pueblos indígenas, señalando la Reforma Constitucional como una pieza clave para la reconciliación nacional y el desarrollo sostenible.