El fenómeno del dooring, o golpear a un ciclista con la puerta de un automóvil por no revisar el retrovisor, más que un asunto de castigos es un asunto de cultura vial y cumplir el marco legal al exigir a quienes aspiran a una licencia de manejo a someterse a cursos y un examen de habilidades, consideró el activista en movilidad Armando Pliego Ishikawa.
El fenómeno identificado bajo el anglicismo de dooring o portazo, se ha vuelto cada vez más común en las calles de México y la ciudad de Puebla.
En febrero, un conductor abrió la puerta de su vehículo estacionado y se quedó varios segundos así; entre tanto un ciclista se va aproximando y atrás de él una unidad de la Ruta 25 del transporte público. Los hechos ocurrieron en la avenida Nacional de Puebla capital.
De acuerdo con la Firma Jurídica León y Castillo, encabezada por Víctor León, “el vehículo (1) tipo Jeep, color negro es quien realiza un corte de circulación y obstruye el tránsito del vehículo (2) que es la bicicleta y su conductor, es decir, el causante de la primera colisión es el vehículo 1, quien sin las precauciones debidas abre su puerta y provoca el primer impacto y causa la caída del conductor o ciclista”.
“El microbús o vehículo 3 de transporte público no puede ser señalado como responsable del hecho de tránsito o muerte por atropellamiento y homicidio imprudencial, ya que, respetando su carril y un aparente límite de velocidad, atropella al conductor del vehículo 2 y su chofer, pero porque el vehículo 1 provoca la caída y materialmente la proyección hacia la llanta trasera, es decir, el chofer del microbús no pudo prever lo ocurrido y por ello no debe ser objeto de sanción penal”.
Al ser cuestionado sobre el fenómeno y si hay un marco legal sobre el tema, el activista y ciclista Armando Pliego, señalo la importancia de que, en el estado y el país, la licencia de manejo deje de conceptualizarse como una medida recaudatoria para que en verdad sea una certificación de habilidades de quienes aspiran a tener una licencia de chofer, basada en cursos en alguna escuela de manejo.
ELEMENTAL, VER EL ESPEJO
Para Pliego Ishikawa el fenómeno del dooring es multifactorial, pero indicó que el principal favor, es que no existe un proceso de evaluación riguroso, al momento de certificar las habilidades viales de una persona para otorgarle una licencia para conducir.
Reconoció que el reglamento municipal sí especifica que quien desciende de una unidad, debe mirar el espejo retrovisor lateral de la puerta, para comprobar que tiene el tiempo y el espacio para abrirla y abandonar el transporte.
URGE TESTIFICACIÓN
Ante la falta de cultura vial, Pliego Ishikawa enfatizó la necesidad de que las autoridades apliquen examen de manejo, como requisito indispensable para emitir licencias a la ciudadanía.
Sin embargo, puntualizó que no hay instancias para aplicar tal evaluación, al señalar que ni las escuelas de manejo establecidas, tienen un programa académico y método de enseñanza estandarizados.
Además del impulso de campañas de concientización que ayudan ,”pero no son sostenibles en el tiempo”, Pliego Ishikawa destacó que se debe impulsar la certificación de las autoescuelas o academias de manejo, y paralelamente, “hacer obligatorio tomar un número de horas determinado en una escuela de manejo y después hacer un examen que incluya modalidad práctica, donde se incluyan todo este tipo de conocimientos que tendrían que ser lo mínimo que debe tener una persona al estar detrás de un automóvil”.
MARCO LEGAL
Reconoció que, en el aspecto de las sanciones, el Marco legal es completo y suficiente, no así en la parte legislativa de señalar la certificación antes de emitir una licencia de manejo.
Armando Pliego detalló que en el Código Civil Federal está especificado el concepto de “responsabilidad objetiva”.
“Plantea que una persona será responsable de los daños intencionales o no intencionales que ocasione al manipular cualquier máquina, que, por su naturaleza, represente un peligro para los demás, como lo es un automóvil, ya sea por su velocidad, su masa o si es una máquina que pudiera tener temperaturas altas, todas las cubre el automóvil, se habla de máquinas en general y dentro de ese universo, está el automóvil y ahí ya vienen establecidas algunas sanciones”.
Por: Arturo Cravioto