Tras el homicidio múltiple que se registró en San Miguel Canoa, el alcalde de la capital, Eduardo Rivera Pérez, reveló que no existía ninguna denuncia formal de la ciudadanía o del presidente auxiliar.
Esto, ante las declaraciones del secretario de Gobernación estatal, Javier Aquino Limón, quien indicó que el edil auxiliar, Paciano Ruperto Pérez Lima, ya había solicitado la intervención del gobierno ante el aumento de inseguridad en esa zona.
“No había existido ninguna denuncia previa, formalmente, de ningún presidente de alguna junta auxiliar ni de ningún ciudadano”, aseveró.
El alcalde indicó que continúan las investigaciones por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE), la cual indicó que la hipótesis es que un grupo de narcomenudistas quería recluir a las personas que se encontraban en el picadero.
Asimismo, el edil exhortó a la ciudadanía a alertar al ayuntamiento sobre la presencia de este tipo de sitios en la ciudad, así como de otros hechos delictivos como robo y venta ilegal de gas, y hasta bares y antros que operen fuera de horario.
“Por eso es muy importante, lo he insistido, es fundamental la participación de la ciudadana en todos y cada uno de los casos que suceden en la ciudad de Puebla”.
Rivera Pérez aseguró que hay coordinación con las autoridades de las 17 juntas auxiliares, además de una correlación entre los tres niveles de gobierno para ejecutar operativos contra la incidencia delictiva.
El edil panista al agregó que la seguridad es responsabilidad de todas las instituciones que componen el Estado mexicano.
“El gobierno municipal trabaja en conjunto con el gobierno estatal, así como con la Guardia Nacional y el Ejército mexicano, para salvaguardar la integridad de la ciudadanía y así se seguirá haciendo”.
Cabe recordar que un día después de la ejecución en esa junta auxiliar, la titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), Consuelo Cruz Galindo, dijo que este picadero funcionaba desde hace 7 años.