Garantizar la democracia social y participativa en todos los órdenes que involucran elegir con nuestro voto a gobernantes y –en nuestro caso- a dirigentes sindicales, obliga exigir la transparencia y limpieza en todo proceso que involucre nuestra voluntad ciudadana.
Mi nombre es Arturo Ramírez, soy trabajador sindicalizado en Volkswagen de México, tengo una antigüedad de 35 años laborando en la planta.
Este manifiesto lo hago a título personal en pleno uso de mis derechos laborales entre los que figura la libertad de expresar los siguientes planteamientos.
El Sindicato Independiente de Trabajadores de Volkswagen de México es resultado de muchas conquistas y también de derrotas gremiales que nos han fortalecido.
Durante décadas los usos y costumbres en los procesos de elecciones sindicales internas han respondido al cumplimiento de nuestros estatutos, que, dicho sea de paso, urgen actualizar.
Si bien el artículo 71 correspondiente al Capítulo XI (De las elecciones) indica que la Comisión Electoral será designada por el Consejo General del Sindicato como hasta ahora se ha venido haciendo, es tiempo compañeros de mirar a la inmediatez de nuestro próximo proceso de renovación sindical, para solicitar a nuestra actual representación gremial, una actuación imparcial en el nombramiento de quienes fueron elegidos para integrar la Comisión Electoral que será la responsable de dar fe y legitimidad a nuestro proceso electoral del próximo 30 de noviembre del año en curso.
Como trabajador sindicalizado ejerzo mi derecho de pronunciarme a favor de exigir equidad, transparencia y neutralidad a quienes serán parte importante de la Comisión Electoral que representa al organismo garante de nuestra próxima elección.
La sanidad en una democracia tiene que estar respaldada por la garantía de respetar la voluntad de quienes iremos a las urnas.
Como trabajador sindicalizado de Volkswagen de México reconozco que, en un futuro inmediato, los trabajadores tenemos que urgir al establecimiento de nuevas reglas donde sea una Comisión Autónoma emanada de la propia base y no de la representación sindical en funciones, la que tenga la facultad de nombrar a la Comisión Electoral, para evitar que el Sindicato sea juez y parte en un proceso de renovación sindical que amerita una verdadera y total democracia.
Hoy reitero mi llamado al Consejo General del Sitiavw para guardar las manos, evitar los sesgos y desterrar alguna imposición o inequidad que ponga en riesgo, la transparencia, legalidad, pero, ante todo, la democracia sindical que hemos preservado por más de 50 años.
Por elecciones limpias y respeto a nuestra autonomía como trabajadores sindicalizados de Volkswagen de México