La agencia de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) informó que, cada hora, la guerra en Sudán deja un niño muerto o herido, a cien días de un conflicto que parece no tener fin.
Desde el 15 de abril, las tropas del ejército dirigido por el general Abdel Fatah al Burhan se enfrentan a los paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), lideradas por el general Mohamed Hamdan Daglo, siguiendo la máxima de “ganar o morir”.
Al menos 3 mil 900 personas han muerto en el conflicto, según un balance que se considera muy subestimado.
Entre estas, hay “al menos 435 niños”, según Unicef, la agencia de la ONU para la infancia, que apunta que, además, al menos 2 mil 025 menores resultaron heridos en el conflicto.
La agencia de la ONU afirma que registró “2 mil 500 violaciones graves de derechos humanos, al menos una cada hora”, aunque seguramente haya “en realidad muchas más”. Catorce millones de niños necesitan ayuda humanitaria, según Unicef.
“Todos los días hay niños muertos, heridos, secuestrados y no les quedan más que escuelas, hospitales e infraestructuras dañadas o saqueadas”, denunció la agencia de la ONU.
Más de 3.3 millones de personas tuvieron que abandonar su hogar y, de estas, más de 700 mil huyeron al extranjero.
Hay millones de personas que sufren hambre y más de la mitad de los 48 millones de sudaneses necesita ayuda humanitaria para sobrevivir, pero las oenegés y la ONU tienen muchos problemas para auxiliarlos.
CON INFORMACIÓN DE AFP