24 Horas Puebla

Será

Puebla de mis albures

Ahora que María Luisa Albores levantó la mano y dijo ser más poblana que los camotes y los borrachitos, hay quien asegura que no, que la funcionaria miente por convivir porque su origen es chiapaneco y sólo vivió unos cuántos años allá en Cuetzalan, pueblo muy bonito, muy pintoresco, pero nada más.

Es más, se atreven a decir: “si de veras muy poblana, muy poblana y muy ecologista como ella dice, desde su puesto, ¿cuántas veces ha sancionado a las empresas que contaminan los ríos que pasan por Puebla?; ¿cuánto ha hecho por el río Atoyac o el Alseseca? ¿Cuántos recursos ha enviado a Puebla para la conservación de sus bosques? ¿Cuántas veces ha abogado por el equilibrio ecológico de la entidad? ¿Cuántas plantas tratadoras ha impulsado?”.

¿Será que ya tiene bajo el brazo su constancia que la acredita como poblana? ¿Será que mañana aparezca sembrando arbolitos allá en lo que era el Bosque de Manzanilla?

¿Será?

 

El aviador de mis albores

Y ya que estamos en esto del abarrote:

Dicen que es el principal promotor de María Luisa Albores en la entidad. Dicen que desde su periódico ya bajó la orden para que ella salga en primera plana, un día sí y otro también. Dicen que hasta en las oficinas de una muy conocida casa de estudios ya está pintando las mantas y armando las matracas y los confetis para los actos de apoyo. Dicen que él es quien creó la organización Puebla de mis Albores y todo porque tiene una plaza ahí en Semarnat.

Y como dicen que dicen, pero no nos consta, no nos queda más que preguntar:

¿Será?

 

El dedo de oro a la poblana

El próximo lunes veremos que la CTM no ha dejado de ser la CTM. Leobardo Soto se convirtió en ese viejo líder sempiterno que vive de la ubre del sistema. Ya quién sabe cuántos años lleva ahí apoltronado en sus oficinas. Cuando estaba Marín, era marinista. Fue Zavalista. Morenovallista. Morenogalista. Barbosista. Y ahora, parece columnista que seguro le pone una veladora a cada uno que levanta la mano en Morena. Ni hablar, que Hugo Atenor Fierro Ferráez lo redima.

¿Será?