Responder llamadas y correos en horas estrictamente laborales provoca que los colaboradores tengan mejor productividad, pues reducen el riesgo de que padezcan estrés laboral, de acuerdo con Ilse Castillo, Project Manager de GeoVictoria, un software especializado en asistencia laboral.
TE PUEDE INTERESAR: Por home office, se registran más de 80 mil millones de intentos de ciberataques en México durante primer trimestre de 2022
Con la pandemia surgieron problemáticas que las empresas debieron atender, como adaptarse al trabajo desde casa, lo que causó un aumento de 28% en las actividades laborales fuera de horario y 14% más los fines de semana, de acuerdo con datos del sitio WorkyBlog.
El Poder Legislativo aprobó la adición del artículo 68 bis a la Ley Federal del Trabajo, donde se estipula que las y los trabajadores tienen derecho a la desconexión digital “a efecto de que les sean garantizados, fuera del tiempo de trabajo legal o convencionalmente establecido, el respeto a su tiempo de descanso, permisos y vacaciones, así como de su intimidad personal y familiar.”
La jornada diurna prevé 8 horas, la jornada nocturna 7 horas, mientras que la mixta incluye 7 horas y media.
La gerente de proyectos refirió que no respetar los tiempos de colaboración del trabajador, puede generarle un estado de estrés y cansancio extremo, lo que afectaría su salud y provocaría un efecto dominó.
Detalló que al afectarse la salud del empleado se impacta directamente en su productividad y se puede provocar ausentismo e incluso su dimisión, lo que implicaría para la empresa tener que invertir tiempo y dinero en nuevas capacitaciones para el personal contratado. Una compañía grande puede perder hasta 1.1 millón de pesos anuales por ausentismo de empleados.
Algunas ventajas de la desconexión digital son que mejora la calidad de vida y el estado de ánimo, facilita la conciliación familiar, reduce el estrés y aumenta la motivación para trabajar, de acuerdo con la plataforma de recursos humanos Holmes HR.
Castillo apuntó que los sectores que están más adaptados a pagar el tiempo extra son los de manufactura y construcción, pues en tiempos de alta demanda requieren tener una producción constante y amplia, mientras que las oficinas han tenido que adaptarse a nuevas realidades.
Señaló que la desconexión digital es sólo un pequeño paso, sin embargo, aún queda un largo camino por recorrer, por lo que sugirió que las empresas tengan políticas internas que respeten los tiempos de los colaboradores, y en caso de que se requiera tiempo extra, el empleador y el empleado deben llegar a un convenio donde haya una compensación, pues es obligación del patrón pagar el tiempo laborado.
Dijo que además se deben establecer acciones de sensibilización sobre el uso razonable de herramientas tecnológicas para evitar la fatiga o problemas de salud, desarrollar mecanismos para prevenir y sancionar actos de hostilidad que puedan surgir cuando el colaborador ejerza su derecho a la desconexión digital, incluyendo segregación o afectaciones a las prestaciones que le corresponden por derecho.
Recomendó a los empleados tener una buena organización y administrar correctamente el tiempo, tener autocontrol y respetar sus horarios, así como conocer sus habilidades y límites de actividades que pueden realizar.
LEG