El Blog de Puebla Deportes por Cuauhtémoc Hernández
Mucha polémica se ha desatado previo al arranque de la pretemporada y el inicio de la temporada en la NBA programado para el 19 de octubre, por una creciente confrontación del organismo con aquellos jugadores que aún a estas alturas se mantienen renuentes a la vacunación en contra de la COVID-19.
La NBA se caracterizó tras la crisis sanitaria el año pasado por dar cátedra en el retorno a la actividad deportiva para poner punto final a la temporada 2019-2020 con la burbuja en Orlando poniendo un claro ejemplo de cómo se debían realizar los protocolos de sanidad para dar prioridad a la vida de los miembros de los equipos participantes, todo ello a pesar de encontrarse aún en la etapa de mayor incertidumbre por una pandemia que seguía evolucionado en sintomatología y variantes del virus. Gracias a ello pudimos ver a los Lakers de Los Ángeles alzarse campeones junto a su estrella LeBron James https://www.youtube.com/watch?v=U-FVFDA8-ts.
La pasada temporada con la imposibilidad de mantener los mismos protocolos con el grueso de los equipos, impuso lineamientos que aseguraron la integridad de todos los involucrados desde los jugadores, pasando por los árbitros, gente de staff que labora en los mismos equipos y por supuesto quienes componen el mismo organismo que dirige el comisionado Adam Silver. Entre las medidas tomadas estaban las pruebas para detectar la enfermedad y los protocolos para apartar en cuarentena a los infectados, así como restricciones de los involucrados para reducir el riesgo de contagios.
Todo ello a pesar de iniciar la campaña sin asistencia de aficionados y las implicaciones de mantener altos gastos e ingresos bajos, situación que fue resuelta poco a poco conforme fue avanzando la inoculación de la sociedad estadounidense, siendo una de las primeras disciplinas en ver el retorno de las aficiones a las duelas, situación que dio esperanza a otros deportes y que desembocó en la conquista del campeonato de los Bucks de Milwaukee de la mano del griego, Gianis Antetokoumpo https://www.youtube.com/watch?v=7PR9jEmGzjM.
Es por ello que previo al arranque de esta temporada la NBA se puso estricta con los jugadores que se niegan a aplicarse las vacunas que previenen las complicaciones de la enfermedad que aún nos aqueja, uno de los principales motivos es que quieren dejar atrás las implicaciones económicas de los exámenes de detección de la enfermedad, de hecho en un inicio el organismo de Adam Silver buscaba prohibir la participación de estos jugadores, situación que fue desechada por la implicaciones legales que conllevarían estas medidas.
Sobre todo al encarar a la asociación de jugadores en las charlas que tradicionalmente enmarcan el arranque de la actividad, a raíz de ello se han visto obligados a presentar un manual de protocolos de 65 páginas que sigue en discusión en este escenario para que sea legal, donde los jugadores sin vacunar estarán obligados a mantener lineamientos como el de no comer ni cenar en el mismo espacio durante las concentraciones y viajes, mantener distancias de seguridad en reuniones, cambiarse en un lugar del vestuario más alejado o quedarse en casa y no en el hotel mientras no participe en actividades de equipo.
Se prohíbe además de forma tajante que dichos jugadores acudan a espacios considerados de mayor riesgo como restaurantes, bares o grandes reuniones en interiores, a dichas medidas se sumarían las tomadas por las ciudades de Nueva York y San Francisco que impusieron el esquema de vacunación a jugadores de sus equipos y visitantes para poder competir en su territorio a no ser que tengan una exención médica o religiosa aprobada.
Cabe destacar que se estima que, del total de jugadores en promedio el 90% ya se encuentra inoculado, entre el 10% restante se ha identificado a figuras de la talla de Kyrie Irving quien incluso no estuvo presente en el media day de los Nets de Brooklyn este lunes por las medidas tomadas en su ciudad, Andrew Wiggins de los Guerreros de Golden State a quien ya le fue negada una exención por motivos religiosos, tras ello ha señalado que seguirá luchando por lo que cree estando dispuesto a perder hasta 350 mil dólares por partido al no jugar los encuentros de local. Bradley Beal de los Wizards de Washington quien ya contrajo la enfermedad y por lo cual se perdió la participación en Tokio 2020 también compone esta lista.
Contrario a esta situación equipos como los Spurs, los Knicks, los Lakers y el Heat de Miami ya han reportado que el total de su plantilla se encuentra con el esquema completo de vacunación. Un fuerte crítico de lo que está sucediendo con los no vacunados ha sido Kareem Abdul-Jabbar el integrante salón de la fama declaró: “No hay lugar para jugadores que están dispuestos a arriesgar la salud y la vida de sus compañeros de equipo, del personal y de los aficionados simplemente porque no son capaces de comprender la gravedad de la situación o de hacer la investigación necesaria”.
“No creo que se estén comportando como buenos compañeros de equipo o buenos ciudadanos. Esta es una guerra en la que estamos involucrados. Y las mascarillas y las vacunas…son las armas que utilizamos para luchar en esta guerra” señaló en un show nocturno el lunes pasado.