Llegamos a junio, mes que abre el verano lo que significa una serie de torneos donde aparecen las selecciones nacionales como preámbulo a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, ya tuvimos la nueva aberración de la CONCACAF llamada Liga de Naciones (que México fue incapaz de ganar https://www.youtube.com/watch?v=3J1_5X6Z38Y), mañana tenemos una nueva fecha de las eliminatorias sudamericanas para Qatar 2022, este viernes arranca la Eurocopa de Naciones y el domingo iniciaría la Copa América en Brasil. Al llevar el nombre de los países estos torneos, desgraciadamente, se prestan para la exacerbación de los nacionalismos y para el uso político del deporte como lo que está sucediendo en Brasil para organizar una Copa América que se postergó, como todos los torneos, el año pasado y que originalmente se organizaría en Colombia y Argentina.
Colombia pidió una nueva postergación para octubre de este mismo año ante el paro nacional y las protestas sociales https://www.youtube.com/watch?v=S32qpHoqDAo, pero la CONMEBOL contestó que no había fechas disponibles y nombró a Argentina como sede única pero la situación de la pandemia llevó al gobierno de ese país a renunciar al torneo lo que dejó al organismo deportivo al borde de la cancelación del torneo, sin embargo, preso de la avaricia encontró a Brasil como su socio ideal y el gobierno de Jair Bolsonaro aceptó el paquete, cuando la pandemia no se ha controlado, ahí se han generado nuevas cepas del virus SARS COV-2 y hay una gran molestia social por la lentitud en la aplicación de las vacunas.
La decisión de CONMEBOL y de Brasil no gustó a los jugadores de varias selecciones que ya disputaron una fecha de las eliminatorias sudamericanas y mañana martes volverán a las canchas, jugadores de la propia selección brasileña, de Uruguay (Fernando Muslera y Luis Suárez) y de Argentina han mostrado sus dudas por la situación sanitaria, mientras que las Federaciones como la uruguaya y argentina se han apresurado a confirmar su participación poniendo como pretexto su tradición en el torneo; ayer CONMEBOL dio permiso a la Asociación de Futbol Argentina que no se concentre en Brasil, sino que se concentre en su predio de Ezeiza y vaya a jugar a territorio brasileño.
¿Por qué Brasil aceptó ser sede a pesar de la molestia de un sector de la sociedad, por qué se apresuró a nombrar sedes a pesar de que Sao Paolo sí se atrevió a decir que no a la copa envenenada? La respuesta no está en la cancha y amenaza con desatar una problemática mayor para la FIFA si se confirma la intromisión del Presidente Bolsonaro en las decisiones de la Confederación Brasileña de Futbol ya que se habla de presiones para destituir al técnico Tité al que se le acusa de ser socialista, para nombrar al ex jugador Renato Gaúcho, cercano a las ideas presidenciales, lo que chocaría con los estatutos de FIFA que tendría que suspender a Brasil.
Bolsonaro enfrenta una caída en su popularidad hasta niveles del 25%, la creación de una comisión parlamentaria de investigación por el manejo de la pandemia donde se analizan posibles delitos cometidos por el Ejecutivo en la lucha contra la Covid-19. Nuevamente el número de ingresos en los hospitales se empieza a incrementar y ya han existido manifestaciones que piden el impeachment del Presidente (proceso de destitución en el que existe un juicio político), también afronta investigaciones de la Policía Federal a su ministro de medio ambiente por presunto contrabando de madera y la caída en su popularidad de cara a un nuevo proceso electoral de 2022 donde el ex Presidente Lula da Silva crece en los sondeos, por lo que el actual mandatario ve en la realización de la Copa América un torneo que le puede ayudar en varias formas: Como una distracción, como una vía para recuperar popularidad en las encuestas al llevarles a los brasileños un torneo de su deporte más querido y si Brasil se llega a coronar aparecería en las imágenes con el trofeo como ya sucedió en 2019 https://www.youtube.com/watch?v=YHL7Ew5uuyo.
Por eso la postura de los jugadores de la selección brasileña que abiertamente han reconocido que no es momento para jugar la Copa América y han anunciado que el martes tras el partido contra Paraguay fijaran su postura https://www.youtube.com/watch?v=0f7hhzdzt2I, además del apoyo del seleccionador Tité hacia sus futbolistas no han sentado bien en el círculo presidencial y han pedido a la Confederación Brasileña de Futbol el nombramiento de un nuevo técnico ya que consideran al estratega como un adversario por sus ideas políticas. El Presidente de la Confederación Brasileña de Futbol, Rogerio Caboclo, quien debía realizar el movimiento de director técnico ayer fue destituido por treinta días por determinación del Comité de ética debido a una denuncia de acoso sexual y moral de una empleada de la CBF, por lo que en este lapso será el Coronel Antonio Carlos Nunes de Lima quien tome las decisiones.
No es la primera vez que un mandatario se apropia del futbol, y del deporte, para conseguir sus objetivos y en Brasil la selección muchas ocasiones ha recibido un trato político: Getulio Vargas fue cuatro veces presidente de Brasil (1930-1934 en el llamado Gobierno provisorio, del 34 al 37 en el Gobierno constitucional, 1937 a 1945 en el Estado Novo y del 51 al 54 cuando fue presidente electo por voto directo), pero pasó de prohibir la presencia de jugadores afroamericanos en la selección porque no ofrecían la imagen de un país “civilizado” a aceptarlos a partir del talento de Leónidas quien incluso se coronó campeón de goleo en Francia 38 y fue la primera gran figura brasileña en mundiales, pero antes en Uruguay 30 el combinado brasileño realmente fue una selección carioca (de Río de Janeiro), el mismo Vargas que puso los cimientos para la fuerte asociación de futbol y política fue quien prohibió el futbol femenil porque no seguía los patrones con los cuales quería identificar a la mujer brasileña.
Más tarde el dictador militar Emilio Garrastazu Médici aprovechó la popularidad de la selección brasileña durante el mundial de México 70, por lo que el periodista y dramaturgo Nelson Rodrigues denominó “patria de botas de futbol” https://www.youtube.com/watch?v=FWMJNDiAOP0. En otros lares, Benito Mussolini utilizó la Copa del mundo de 1934 para promover su dictadura, Adolfo Hitler, de la mano de su ministro de propaganda, Joseph Goebbels, usó los Juegos Olímpicos de Berlín 36 para promover el nazismo y se valió de todos los medios como el cine y la naciente televisión, así como retomó una tradición griega para ligarla a la superioridad de la raza aria y de esa forma nació el recorrido de la antorcha olímpica, aunque en la actualidad nosotros asociamos ese recorrido con otros valores https://www.youtube.com/watch?v=WoyxQpvIt8Q. La República Demócrata Alemana utilizó sus éxitos deportivos (muchos de ellos a partir de una política de dopaje de estado) como propaganda que demostraba que el régimen tenía éxito, lo mismo hizo la Unión Soviética y en España, el franquismo utilizó los triunfos del Real Madrid en Europa, como algunos ejemplos.
Si Bolsonaro se sale con la suya y la Confederación Brasileña de Futbol destituye mañana a Tité para nombrar a Renato Gaucho, estaremos ante un nuevo capítulo que pondrá a la FIFA en otra situación complicada; sus estatutos contemplan sanciones para las federaciones cuyos gobiernos se entrometan en las decisiones deportivas, dichas sanciones pueden llegar a la suspensión de partidos y de su participación en fases de clasificación, por lo que aquí se abre la interrogante si la FIFA de Infantino estaría dispuesta a llevar a las últimas consecuencias su reglamento en contra de una Federación que siempre ha clasificado a los mundiales, que es la única pentacampeona mundial y que siempre es una de las grandes atracciones del torneo, por lo que significa ganancias millonarias para el organismo que preside Gianni Infantino continuando con la mejor tradición de Joao Havelange y Joseph Blatter, llevar al deporte a términos mercantilistas y usar sus valores para fortalecer las relaciones políticas.
Mañana martes es un día clave no sólo para el futbol sudamericano sino para el mundial. Si los jugadores brasileños mantienen su digna postura de no jugar la Copa América pueden mandar un mensaje al mundo y recordar al resto de futbolistas que ellos son los verdaderos protagonistas de este deporte, que sin ellos no puede haber torneos multimillonarios, que ya es hora de que los hombres de pantalón largo se dejen de llenar los bolsillos cada vez con mayor avaricia a costa del estado físico de los que verdaderamente logran que las competencias sean apasionantes. Mañana un grupo de jugadores de futbol, puede retar a un mandatario urgido de popularidad.
@abascal2
El Blog de Puebla Deportes por Antonio Abascal