La prohibición para que los restaurantes de Puebla sirvan en mesa del 29 de diciembre al 11 de enero, aunado a los efectos de la pandemia, podría generar que más de 10 mil 700 negocios relacionados con el sector alimentos, cierren definitivamente durante este año, sin la certeza de que reabran en el 2021.

Los negocios mencionados representan el 30 por ciento de los que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) tiene catalogados en el sector de preparación de alimentos y bebidas alcohólicas y no alcohólicas en el estado de Puebla, que son 35 mil 938.

Si se toma en cuenta que cada uno de esos negocios que cerrará, tiene un promedio de 8 trabajadores, se podría hablar de que están en riesgo más 85 mil 600 puestos de trabajo en el sector alimentos y bebidas en Puebla.

Ante estas proyecciones, la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC) ve con preocupación que no haya un apoyo del gobierno mexicano y, específicamente del poblano, para los negocios, como sí ocurre en otros lugares del mundo.

El sector formal de Puebla acatará el decreto gubernamental que permitirá únicamente el servicio para llevar y de entrega a domicilio en restaurantes, cafeterías, loncherías, fondas y todos los negocios del giro, pues la prioridad es la salud.

Sin embargo, las empresarias y empresarios ven con desánimo el actuar de los gobiernos en turno, que no han sido capaces de contener el ambulantaje ni la saturación en el transporte público.

Tan solo de los afiliados a CANIRAC, se prevén más de 270 negocios cerrados en lo sucesivo, porque carecen del capital para pagar a aplicaciones móviles para entregar a domicilio. De ellos, habrá al menos 2 mil 160 empleos perdidos.

Los socios de CANIRAC y la presidenta Olga Méndez Juárez, piden a las autoridades municipales, del gobierno del estado y del gobierno federal, ayuda para las empresas, ya sea en forma de subsidios para el salario solidario, creación de fuentes de trabajo para quienes se verán desempleados, créditos a baja tasa, y exenciones de impuestos y pagos.

Además, se pide que la atención no solo se focalice al primer cuadro de la ciudad, toda vez que tianguis y mercados de otras zonas de la capital, generan movilidad desbordada. Igualmente, se solicita atención al transporte público para evitar saturaciones, y prevenir la operación de taxis pirata.

A la población, la invitamos a ser responsable y a quedarse en casa, en la medida de sus posibilidades. También le solicitamos el consumo local para apoyar a los restaurantes que ofrecen servicio para llevar y a domicilio.

Coincidimos con el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) respecto a que ¡el sector organizado de Puebla no podrá con un cierre de más de 15 días!