Durante la contingencia por el COVID-19, el Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado del municipio de Atlixco (SOAPAMA) incrementó 200% el monitoreo mientras que la cloración del agua pasó de 0.5 a 0.8 miligramos por litro, esto con el fin de garantizar que esté libre de agentes contaminantes, informó el director general, Edgar Moranchel Carreto durante el levantamiento de muestras en el manantial de Axocopan.
En el marco de esta actividad, Moranchel Carreto señaló que, desde el inicio de la pandemia, en marzo, se aumentaron de 1 a 3 las rondas semanales que realiza la gerencia de Recursos Hídricos para revisar que el agua esté desinfectada en los 22 pozos que abastecen Atlixco.
Asimismo, dio a conocer que en esta ocasión el levantamiento lo realizó un laboratorio externo certificado, actividad que se efectúa de manera semestral, en la que durante una semana son revisados los pozos con la finalidad de verificar el trabajo permanente del organismo, “el que lo realice alguien ajeno al sistema nos permite revisar con confiabilidad, que nuestros procesos se están haciendo correctamente y dar a la ciudadanía la confianza que el agua en sus hogares es de calidad”, apuntó.
El titular del SOAPAMA explicó que el procedimiento de muestreo está normado por la Secretaría de Salud y se debe seguir tal cual, para evitar interferencias en los análisis, su duración es de alrededor de 40 minutos por cada sitio.
“Los resultados obtenidos se cotejan con los límites máximos permitidos por la NOM-127-SSA1 que aplica para determinar si el agua es apta para uso y consumo humano, o requiere algún tratamiento para potabilizarse”, acotó el funcionario.
Edgar Moranchel Carreto indicó que son pocos los sistemas operadores que realizan estas acciones de vigilancia de calidad del agua, pero son cuestiones esenciales para saber que se está suministrando agua de buena calidad, sin metales o componentes que dañen la salud.