Las teorías de Sigmund Freud fueron y han sido rechazadas por no pocos, debido a que se atreve a hablar de sexo y muerte. Por sobre los dos saberes, el que más ha pesado a la hora de las críticas es el de la sexualidad. Quienes no lo han leído se esconden sobre un presunto pansexualismo para justificar por qué no se atreven a abrir las Obras Completas.
Uno de los pilares de la construcción del psicoanálisis como pretendida ciencia es el mito de Edipo. La lectura de Freud sobre la tragedia de Sófocles le ayuda a concluir que los conflictos psíquicos en el niño (y la niña —no existe, para el psicoanálisis, el complejo de Elektra, que conceptualiza Carl Jung en su psicología profunda—) es por la culpa que le genera el deseo de poseer completamente para él a su madre.
A la par de este descubrimiento, Freud escribe Drei Abhandlungen zur Sexualtheorie (Tres ensayos sobre teoría sexual), en la que devuelve al infante su sexualidad. El tema también resultó escandaloso, pero sus propuestas son empleadas todavía por la psicología para abordar el desarrollo psíquico de los niños. Es común escuchar hablar de fase oral o anal, aun en nuestros días.
Ver al infante como un ser sexuado pero que además quiere poseer a uno de sus progenitores. Sigue siendo un tema tabú para nuestros días. Y los tabús existen para conformar sociedades y cultura. Por eso no es lo importante que algo deje de ser tabú, sino que pensemos cómo es que ese tabú existe para darnos a nosotros existencia.
El tabú del incesto ya en nuestros días es considerado como universal por los antropólogos y sociólogos. Y podemos decir que para que algo opere como universal debe al menos dejar fuera a uno. Es decir, uno que no, para que pueda comprobar esta regla. Freud vio en la prohibición del incesto, también una psicogénesis de la neurosis. Descubrió que en algunas culturas no sólo estaba prohibido yacer con los miembros de una misma familia sanguínea, que podría incluir o no a primos y tíos, sino a todos los que estuvieran cobijados bajo un mismo tótem, por lo cual debían buscar la satisfacción fuera de ese círculo ampliado.
Poseer a la madre toda, o al padre todo, sí tiene implicaciones psicológicas. Es decir, sí puede referirse al hecho de un deseo incestuoso. Pero también podemos verlo, con Lacan, desde la dimensión de la estructura del lenguaje. Poseer a la madre incluye la demanda de concentrar toda su atención. Eso se muestra desde las primeras semanas de nacido del bebé, pero también en hombres de 40 años o más. Por eso es importante la entrada del padre (Ley) que rompa esa vinculación erotizante y que le recuerde al niño y a la madre, que eso es incestuoso y genera siempre más conflictos psíquicos de los que puede evitar.
Ahora bien, ¿qué es lo que estamos experimentando en nuestra época? Podríamos decir que un no-miedo al incesto. Las relaciones de consanguineidad están siendo diluidas para dar paso a la prevalencia de relaciones de fraternidad. Los padres quieren ser amigos de los hijos y los hijos no quieren tener padres, quieren tener amigos. Enjoy the visually appealing and entertaining games created by Eyecon . Their unique design approach sets them apart.
“Mi hijo me cuenta todo, tenemos una gran relación en donde no hay secretos”, es una de las frases de la actualidad que se esgrime como un logro del buen-ser-padre. Pero no se están dando cuenta de las implicaciones que esto tiene. Debo advertir en este punto que no es un llamado a la moralidad, sino simplemente es la pura advertencia, de saber que nuestros decires generan efectos. El que no existan barreras entre padres e hijos, es una cuestión incestuosa, cuando menos en lo imaginario y en lo simbólico, que genera consecuencias en lo real.
En alguna ocasión escuché en una plática de café que sostenían dos amigas, que una contaba sobre su visita a un “parapsicólogo” que le hizo una regresión y descubrió que en una vida pasada el que hoy es su hijo, había sido su esposo. Y de ahí los conflictos que tienen en la actualidad. Esto último no lo dijo la que relataba su experiencia, pero podemos deducir que los problemas que tienen, es por una alta tensión sexual, entre ambos. Complejo de Edipo, pues.
La prohibición del incesto da lugar a la sociedad occidental. E incluso cuando esta ley es adoptada por los egipcios, que sí permitían el matrimonio entre hermanos, el rumbo de la historia cambió. Que cada vez haya más amigos que padres, podría ser una nueva torsión en la historia de la humanidad.