Profesores-investigadores del Tec de Monterrey, Campus Ciudad de México, y del Departamento de Ingeniería Biomédica del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ), adaptaron visores de buceo como alternativa a las mascarillas N95, a fin de que se empleen como protección facial del personal médico.
El sistema está compuesto por una máscara de buceo, que protege el rostro de posibles partículas exteriores a las que está expuesto, así como por un adaptador con filtro bidireccional que protege de patógenos a quienes atienden pacientes con COVID-19. Además, en comparación con los googles regulares que normalmente se empañan, este desarrollo está diseñado para minimizar la acumulación de humedad en el visor.
“La mascarilla queda totalmente sellada y permite la protección total de la cara, además es esterilizable. También, le hemos implementado un adaptador que hace posible la colocación de un filtro que brinda protección ante la entrada y salida de bacterias o virus”, detalló Mariel Alfaro, una de las líderes de este proyecto.
Entre los hospitales que ya han recibido este material médico se encuentran el Hospital General de Zona 24 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Instituto Nacional de Perinatología (INPer), Hospital Regional General Ignacio Zaragoza del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de Trabajadores del Estado (ISSSTE), así como la Cruz Roja Mexicana Polanco.
En este proyecto participan, por parte del Tec de Monterrey, los investigadores Mariel Alfaro, Rita Fuentes, Manuel Navarro, Eduardo Corona, José A. Fuentes, Valentín Ortiz, Manuel Hernández. Por el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ) son: Fanny Alvarado, Jesús Mejía, Rubén Fuentes e Iván Matehuala.