El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) capacitó a 54 operadores de la Planta de Lavado Metepec, respecto al manejo de la ropa hospitalaria, y así evitar riesgos de contagio.
La jefa del área de ropa hospitalaria de Nivel Central, María de Lourdes Téllez Nava, señaló que es necesario que los trabajadores estén informados sobre los riesgos de propagación enfermedades en los procesos del lavado de ropa séptica.
Trabajadores y trabajadoras recibieron instrucciones sobre: el equipo que deben portar los operadores de acuerdo con las funciones que desempeñan durante su jornada, las fórmulas que se aplican para el lavado según la clasificación de las prendas, las observaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y los protocolos que el área médica debe seguir para manejar ropa hospitalaria.
Con relación a las recomendaciones de la OMS explicó que la ropa con COVID-19, deberá clasificarse como ropa sética y contaminada, la cual debe tratarse con agua y jabón a temperatura de 60 y 90 grados centígrados. En caso de no contar con estas temperaturas, se debe utilizar cloro con 0.05 por ciento de concentración en el agua.
Téllez Nava indicó que el personal del área de clasificación debe utilizar un uniforme contractual, bata, guantes, zapatos tipo industrial, gorro, respiradores N95 y protección ocular, como equipo de protección. El resto del personal debe llevar el uniforme contractual, cubrebocas quirúrgico, gorro y zapato industrial.
La funcionaria de Nivel Central explicó que el respirador sólo debe ser utilizado por los operadores de lavandería y quienes se encuentren en el clasificado de ropa hospitalaria y sanitización del vehículo, ya que son áreas de contaminación susceptibles de propagar virus.
En el caso de los cubrebocas quirúrgicos, éstos serán asignados a los operadores que se encuentren en el lavado, doblado, secado y almacén de producto terminado.
Por su parte, el gerente de Planta de Lavado Metepec, Ricardo Barrientos, informó que dan servicio a todas las unidades médicas del estado de Puebla y parte de las que se encuentran en Tlaxcala; diariamente lavan 5.5 toneladas de ropa, con dos equipos.
Esta unidad cumple con los protocolos señalados en el manejo de prendas contaminadas. No se lava en el momento de su llegada sino que se esparcen con cloro y agua dentro del camión que las transporta, se cierra el vehículo, se deja reposar y después de un tiempo se descarga.
El gerente puntualizó que la ropa se deposita en un lugar donde se almacena hasta juntar los 250 kilos, para después seguir el proceso de limpieza, donde se les proporciona a los operadores el equipo de protección.
A la capacitación también asistieron: el titular de la División de Servicios Complementarios, Saúl Ayala Argüello; y el Administrativo Normativo de Ropa Hospitalaria, Carlos Enrique Pascacio Cancino.