Desde hace tiempo se tenía la sospecha que las delegaciones del DIF estatal, al igual que las de la Secretaría de Bienestar servían como centro de operación política desplegadas en todo el estado.
Se habla de que ambas estructuras están a las órdenes del operador político del gobernador, Eric Cotoñeto, quien fue pillado por el periodista Rodolfo Ruiz en pleno festejo navideño, a finales del año pasado, con una buena parte de esta estructura.
Hoy, en este espacio, le presentamos el caso de la delegación regional 03 con sede en Zacatlán, a cargo de Martha Álvarez Cisneros, quien con fecha 22 de enero de 2020 giró un oficio al director de delegaciones, Eduardo Elías Gandur Islas y a la directora administrativa de dicha dependencia, Paz Griselda Leticia López Jiménez, donde da cuenta de los cambios de personal que requiere hacer en su demarcación para incorporar, y así lo dice textualmente, “a mis compañeros en campañas políticas y operadores de confianza”, Gustavo Gómez Reyes como coordinador jurídico y Emmanuel Garrido Márquez como coordinador de salud.
Para ello, la susodicha, Martha Álvarez, cínicamente pide se dé de baja a dos trabajadores cuyo pecado es no pertenecer a su grupo político y no ser “sus operadores” de confianza, lo cual es simplemente inadmisible.
Esto demuestra que la actual administración opera de la misma forma como lo hicieron las anteriores, priistas y panistas, las cuales utilizaban las delegaciones de sus dependencias como estructuras político-partidistas.
Reitero, se dice que todos los delegados del DIF y de la Secretaría de Bienestar fueron palomeados por el operador político del gobernador, Eric Cotoñeto, a quien le rinden cuentas y es una especie de secretario sin cartera dentro de la administración estatal.
La estructura gubernamental descansa en manos de Cotoñeto, quien es el encargado de construir una estructura propia; incluso, ajena a la propia Morena, para lo cual se han reclutado a varios personajes ex priistas y ex morenovallistas.
La oposición en Puebla, si es que existe, deberá estar muy pendiente, porque la estructura gubernamental se comienza a llenar de operadores políticos rumbo a 2021 y la muestra está en lo que presentamos este día que ocurrió en Zacatlán, donde mínimo deberían dar de baja a la delegada que no trabaja en beneficio de la sociedad, sino en forma política.
TODOS SALIERON GANANDO
La incorporación temporal (que se puede convertir en permanente) de Lalo Covián Carrizales a la Secretaría de Movilidad, en sustitución de Ale Rubio, es una jugada maestra donde todos salieron ganando.
Me explico, ganó el ahora G6 (¿o aún G7?) porque Covián de alguna forma es interlocutor de este grupo y representa una posición para ellos ante la administración de la alcaldesa Claudia Rivera.
Pero también gana la alcaldesa, porque obtiene a un hombre que se ha convertido en experto en el tema y que precisamente pertenece al grupo de regidores que se ha transformado en la oposición dentro de su Cabildo.
Gana el propio Covián porque ahora podrá demostrar todo lo que ha adquirido en conocimiento en movilidad, tema en que se ha convertido en experto y por lo mismo podría quedarse en la posición.
Y gana también un viejo luchador de izquierda, al cual por fin la revolución le hace justicia, que no es otro que el economista Alejandro Chávez Palma, un viejo luchador y representante auténtico de la izquierda poblana, quien era el suplente de Covián.
No por nada la alcaldesa Claudia Rivera le dio la bienvenida a su “viejo camarada” y compañero de lucha. La presidenta municipal capitalina se anotó un diez en la pasada sesión de Cabildo.
BIENVENIDO CONTRARÉPLICA
Este lunes comenzó a circular por las calles de Puebla el nuevo proyecto del gran periodista poblano Mario Alberto Mejía Martínez, ContraRéplica.
Bajo el patrocinio de la familia Grajales, Toño papá y Toño hijo y la dirección de Mejía, el éxito está garantizado para este nuevo diario que viene a refrescar el mercado poblano, el cual, y no es crítica, se ha pasmado.
El lugarteniente de Mejía, Nacho Juárez, y todo el equipo de esta nueva publicación, auguran que leer ContraRéplica será algo más que obligatorio.