Foto: Álvaro Ramírez
GOLPE DE TIMÓN. El aspirante a la dirigencia estatal del tricolor sentenció que no puede haber ya más “vacas sagradas” en el priismo poblano.
La desaparición es el único destino que espera al Partido Revolucionario Institucional (PRI), si no atiende con seriedad esta “última llamada” a la competencia seria y con fuerza en los procesos electorales local y federal del año 2021, advirtió el secretario de Organización de Comité Directivo Estatal (CDE) y aspirante a la presidencia del tricolor en Puebla, Néstor Camarillo Medina.
El ex alcalde de Quecholac advirtió que en el tricolor urge un relevo generacional y una suerte de desacralización: ya no puede haber más “vacas sagradas” que por su nombre obtienen posiciones para ellos, sus hijos, sus esposas, sus novias… y deben ser el trabajo y la lealtad los valores que se ponderen al entregar candidaturas.
En entrevista, Néstor, el más joven de los aspirantes que han levantado la mano, reconoce, sin autocomplacencias, que actualmente el voto base del PRI en Puebla es el más bajo de su historia, apenas se puede contar con 300 mil potenciales sufragios. De ahí su advertencia: renovación o aniquilación.
“El 2021 es la última llamada que tenemos los priistas en Puebla para recuperar los espacios que hemos venido perdiendo. El partido debe iniciar un proceso de renovación ya, y de inmediato tenemos que volver a nuestras bases a reconstruir lo que se ha perdido.
“Tenemos consejos políticos que ya no están vigentes, empezando por el estatal, los municipales. Tenemos que empezar a llamar a los ciudadanos, más que a los partidos, porque antes la marca solita te daba votos, hoy es al contrario… Hay que hacer una labor titánica a partir de ya”, lanzó Camarillo.
—¿Qué le pasará al PRI si no toma esta última llamada?
—Vamos camino a la desaparición, de no escuchar a la militancia, de no reagruparnos, de no iniciar ese trabajo urgente. En Puebla, vamos al camino de la desaparición. Debemos ya prepararnos para duplicar el número de alcaldías que hoy gobernamos (unas 80 de 217), para triplicar el número de diputados locales (cinco apenas) que tenemos, lo mismo con los diputados federales (dos y plurinominales).
“Yo, en esta aspiración legítima (ser el presidente del CDE) le hago un llamado urgente a nuestro partido para que de inmediato iniciemos con los trabajos para recuperar la confianza de los poblanos y nuevamente ganar elecciones”.
—¿Puede el PRI, actualmente en el escenario que está, con un nuevo partido hegemónico, que es Morena, dar la pelea en 2021?
—Claro que sí. En la campaña (extraordinaria) de 2019 yo fui coordinador de Activismo y Promoción al Voto en el estado y, déjame decirte que sin un peso tuvimos casi 300 mil votos. De cinco presidencias que se jugaron (en procesos extraordinarios), ganamos las cinco, aunque una nos la tiraron en tribunales.
“Eso habla de un priismo vivo, de un priismo que en los municipios sigue fuerte. Hoy, nuestra base son 300 mil votos. Esa es nuestra base, de ahí partamos hacia arriba por lo menos a duplicar ese número y seamos 600 mil para 2021”.