Aspirantes difieren sobre posible cancelación del proceso, luego de que 6 de 16 integrantes del CEN acordaran suspenderlo
Por: 24 Horas El Diario Sin Límites
Foto: Es Imagen
Escala batalla en Morena
De cara al proceso para elegir la dirigencia nacional de Morena, ayer la batalla entre los aspirantes y órganos de dirección escaló.
Mientras Yeidckol Polevnsky manifestó que el Comité Ejecutivo Nacional que ella encabeza determinó cancelar la elección por las irregularidades registradas en las asambleas distritales; Bertha Luján y la Comisión de Honestidad y Justicia de Morena, advirtieron que ese órgano de dirección no tiene facultades para echar abajo el proceso.
En tanto que Mario Delgado acusó que esas declaraciones, sólo evidencian la falta de acuerdos y desorganización en el proceso de renovación de su dirigencia. “Traen un relajo”, señaló a 24 HORAS.
Desde temprano, Yeidckol Polevnsky, líder nacional de Morena, informó que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Morena acordó posponer el proceso de elección de su dirigencia nacional.
“El desaseo es total, la forma en que se están haciendo las asambleas es una aberración porque quieren validar un padrón manipulado. En base a esto, no es viable validar estas asambleas porque todo depende de un padrón falso”, señaló en entrevista con 24 HORAS.
Recordó que la Comisión de Organización de Morena, que presidió Gabriel García, hoy coordinador de Programas Integrales de Desarrollo y de los delegados del Gobierno en los estados, que en la víspera tuvieron una reunión con el presidente Andrés Manuel López Obrador en la que les pidió no meterse en la elección de Morena, le entregó un sistema con 3 millones afiliados, pero sólo 600 mil documentos que respaldan.
Dicho acuerdo, fue decidido en una sesión a la que no se convocó en tiempo y forma y en la que estaban presentes 6 de sus 16 integrantes. Los últimos acuerdos de ese órgano encabezado por Polvensky se han tomado en la madrugada y a puerta cerrada.
Ante estas declaraciones, la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia (CNHJ) de Morena, emitió un comunicado para aclarar que el CEN carece de facultades estatutarias para ordenar la suspensión del proceso electivo en curso y por lo tanto, éste continúa con normalidad, tal como lo establece la convocatoria al Tercer Congreso Nacional, que tendrá lugar el 23 y 24 de noviembre próximos. Y advirtió que “cualquier información en otro sentido carece de legalidad y veracidad”.
En tanto, la también aspirante a la dirigencia nacional de Morena, Bertha Luján, manifestó a 24 HORAS que no existen motivos para cancelar la elección, “en dado caso la próxima semana se tiene que hacer una evaluación” y a su juicio dijo que sólo la autoridad electoral, podría cancelar el proceso interno de renovación de dirigencia.
Sin embargo por la noche, Polevnsky, publicó un texto con la interpretación de una resolución del Tribunal Electoral en el que asegura que el CEN sí tiene atribuciones para cancelar las asambleas y que la CNHJ “no es el órgano competente para emitir disposiciones normativas estatutarias, ya que esto es contrario a la naturaleza de un órgano de justicia interpartidista”, por lo que no es autoridad para emitir normas de carácter político.
Desde hace dos fines de semana, Morena ha llevado a cabo asambleas distritales por circunscripción para elegir a los delegados que tendrán voz y voto en el Congreso y que les da derecho a participar como candidatos a la dirigencia nacional.
En el desarrollo de estas asambleas se han registrado enfrentamientos, violencia y en algunos casos se han suspendido, la mayoría porque los locales son pequeños y los asistentes rebasaban la capacidad de éstos.
La semana pasada, Bertha Luján presumió haber sido ser la más votada en su asamblea, Yeidckol Polevnsky tiene programado asistir a su asamblea este fin de semana.
Mario Delgado no pudo ser votado porque su se suspendió su asamblea, y Alejandro Rojas Díaz Durán advirtió que no participaría en ninguna asamblea, por considerar que era un ejercicio amañado.
Transparentan sentencias
El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó el dictamen que reforma la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública, para obligar a los Poderes Judicial Federal y los de las entidades, a hacer públicas y actualizar las versiones del texto íntegro de todas sus sentencias.
El documento establece que actualmente no se puede evaluar la impartición de justicia ni la pertinencia de la carrera de jueces y juezas, y por ello se necesitan sentencias públicas “para romper con las prácticas de nepotismo, amiguismo, los pactos para los puestos”.