Por: Agencia Notimex
Foto: Especial
La extinción de los elefantes africanos de bosque exacerbaría el cambio climático, según un nuevo estudio que vincula la alimentación de estos mamíferos con un aumento en la cantidad de carbono que los árboles pueden almacenar.
Esta especie de herbívoros se está extinguiendo rápidamente y si permitimos que ésta tendencia continúe, también estaremos empeorando el cambio climático, pero si los protegemos y conservamos simultáneamente cuidaremos el medio ambiente, advierte un equipo internacional de investigadores.
Es un ciclo vital, afirman los científicos en un artículo publicado en la revista especializada Nature Geoscience, en el cual describen a estos elefantes de bosque (Loxodonta cyclotis) como más pequeños y vulnerables que sus parientes más conocidos, los de sabana, que son más grandes.
Son animales fascinantes, son inteligentes, sensibles y altamente sociales, pero su característica más notable es su tamaño. Pasan la mayor parte de su vida comiendo y buscando comida, gustan especialmente de alimentarse de árboles jóvenes y plantas recién abiertas en el bosque.
Aquí es en donde los investigadores encontraron que estos elefantes africanos del bosque pueden tener efectos importantes sobre los ecosistemas y los ciclos biogeoquímicos.
Aunque la influencia de los elefantes en la estructura, la productividad y las reservas de carbono en las selvas tropicales de África sigue siendo en gran parte desconocida, el grupo investigador cuantificó esos efectos incorporando la perturbación de este mamífero en el modelo de Demografía de Ecosistemas.
Encontraron que la reducción de la densidad del tallo del bosque debido a la presencia de elefantes conduce a cambios en la competencia por la luz, el agua y el espacio entre los árboles.
Estos cambios favorecen la aparición de árboles más pequeños y otros más grandes con mayor densidad de madera. Esta modificación en la estructura de la selva tropical africana y la composición de las especies aumenta el equilibrio a largo plazo de la biomasa aérea.
El cambio también reduce la productividad primaria de la red forestal, dada la compensación entre la productividad y la densidad de la madera. Por cada 0.5 a 1 animales por kilómetro cuadrado, las perturbaciones de los elefantes aumentan la biomasa sobre el suelo.
Los científicos sugieren que la presencia de los elefantes forestales puede haber dado forma a la estructura de las selvas tropicales de África, lo que probablemente juega un papel importante en la diferenciación de las selvas tropicales de la Amazonia.
Desafortunadamente, esta especie podría desaparecer pronto, ya que alguna vez se calculó que eran millones y en la actualidad su población es menos del 10 por ciento de su tamaño potencial. En la década de 2002 a 2011 habría muerto 62 por ciento de los elefantes de bosque, según las estimaciones.
Su rápida desaparición se debe principalmente a la caza furtiva para alimentar la demanda asiática de marfil, así como la creciente invasión humana en sus hábitats