Las Serpientes
Por: Ricardo Morales / @riva_leo
La salida de Marcelo García Almaguer de las filas del panismo poblano es prácticamente el último clavo en el ataúd del que alguna vez fuera el partido dominante en Puebla.
También deja en claro que su actual presidenta, Genoveva Huerta, tal vez tiene muy buenas intenciones, pero carece de oficio político, sobre todo de liderazgo para enfrentar esta coyuntura que vive el panismo poblano.
Si algo hay que reprocharle a Rafael Moreno Valle y a Martha Erika Alonso es que no supieron preparar verdaderos líderes, sólo imponían personajes que se sustentaron por la fuerza que ambos ejercían en el poder.
De otra manera no se puede explicar cómo en menos de 40 días el morenovallismo se extinguió, y ahora una buena parte de lo que fue el aparato electoral más importante que haya visto Puebla se encuentra totalmente desarticulado y dando tumbos sin que nadie ponga punto final.
De verdad es una pena ver en lo que acabó un proyecto que en algún momento tuvo como objetivo hacerse de la Presidencia de la República.
Sirva este ejemplo para todos los demás que aspiran al poder y que, en vez de formar cuadros de liderazgos, privilegian por encima de cualquier cosa la obediencia en lugar de la razón.
La orfandad política en la que hoy se pasea el panismo poblano se debe en una gran medida a que ni Rafael ni Martha se abocaron a formar cuadros: imponían personajes a los cuales podían manipular a su antojo sin tomar en cuenta que algún día se iba a necesitar de alguien que pudiera ocupar el lugar de ambos.
El panismo ahora tiene que cerrar filas y sería un terrible error de Acción Nacional abandonar la plaza y no presentar candidato a la contienda.
Antes del morenovallismo, el PAN no ganaba elecciones, pero era en cierto modo una conciencia social y un contrapeso para los gobiernos en turno, algo que aún puede hacer y que sería más que necesario.
Sólo queda como un estandarte dentro del panismo poblano un personaje como Jorge Aguilar Chedraui, quien ha refrendado su militancia dentro del albiazul y es uno de los símbolos al interior del PAN, el cual necesariamente en breve deberá tomar la estafeta antes de que la tragedia pueda ser peor.
CONTADOS, LOS DÍAS DE LA SECRETARIA DE TURISMO MUNICIPAL
Hace unos días la titular del área de Turismo de la capital, Lirio Azahalia González Luna, violentó los derechos humanos y laborales de uno de sus colaboradores, al solicitarle por escrito un examen de Inmunodeficiencia Adquirida (Sida) por el simple hecho de que sospechaba que el trabajador podía tener esta enfermedad.
Este acto es completamente reprobable dentro de una administración (la de Claudia Rivera) donde la inclusión y el respeto a los derechos humanos es una de sus principales banderas.
Está por demás decir que esta anomalía, que podría ser un escándalo nacional, le costará caro a Lirio Azahalia, quien llegó con aires de “diva” a ocupar la mentada dependencia, pues se comenta que sólo cobra la quincena y se va.
Vamos a estar muy pendientes de que le den las gracias a este personaje que no merece estar al frente de ningún puesto público, mucho menos ser parte de la administración municipal.
JAVIER LUNA, UN PROFESIONAL DE LAS RELACIONES PÚBLICAS
Quien fuera en varias ocasiones el encargado del área de Comunicación del PRI en Puebla, Javier Luna, y recientemente también colaborara en Comunicación Social de la Presidencia de la República con Enrique Peña Nieto, es parte del equipo del aspirante de Morena a la gubernatura, Luis Miguel Barbosa Huerta.
Sin duda, ello constituye un acierto de quien es el más fuerte aspirante para hacerse de la candidatura del partido lopezobradorista a la gubernatura en la elección extraordinaria el próximo 2 de junio.
Javier es un profesional de los medios y un maestro en el arte de las relaciones públicas, a quien conozco desde hace más de 27 años, caracterizándose siempre por su buen trato y su don de gente.
Enhorabuena, mi querido Javier.